MSF vuelve a Calais para dar asistencia médica y psicológica en la frontera franco-británica
La situación es cada vez más precaria para las personas desplazadas en Calais, lo que ha contribuido al deterioro de su estado de salud
Calais, 16 de mayo de 2023 - Cientos de personas intentan llegar a Reino Unido por la frontera franco-británica cada día, arriesgando sus vidas ante falta de perspectivas en Francia o para reunirse con familiares en el Reino Unido. En Calais, se enfrentan a la falta de apoyo de las autoridades, al aislamiento de las comunidades locales y a barreras lingüísticas entre ellos y los proveedores de servicios sanitarios, lo que debilita aún más a estas personas que con frecuencia han sufrido violencia y traumas psicológicos en sus viajes. Ante la falta de atención sanitaria a migrantes, refugiados y solicitantes de asilo por parte del gobierno francés, Médicos Sin Fronteras (MSF) ha empezado a trabajar en Calais para proporcionar atención médica y psicológica.
Entre 400 y 600 migrantes, refugiados y solicitantes de asilo viven actualmente en Calais. Se trata de una cifra baja en comparación con años anteriores, debido tanto al aumento de los cruces como a la política de “cero puntos de fijación”, que dispersó a la gente por la costa norte de Francia.
“Los desmantelamientos sistemáticos por parte de la policía, a veces con violencia, la confiscación de efectos personales, la marginación, los obstáculos impuestos por las autoridades y la persecución de organizaciones de voluntarios han conducido a una situación cada vez más precaria para las personas desplazadas y han contribuido al deterioro de su estado de salud”, afirma Pauline Joyau, coordinadora del proyecto de MSF en Calais.
Para ayudar a cubrir las necesidades sanitarias de migrantes, refugiados y solicitantes de asilo dispersos por asentamientos informales y ayudarles a acceder a la atención sanitaria, el equipo de MSF visita las zonas donde viven, incluidos asentamientos, centros de día y albergues. Los miembros del equipo sensibilizan sobre los problemas de salud mental, identifican los casos más vulnerables mediante actividades psicosociales y los derivan a centros médicos gratuitos o a hospitales, en cooperación con los proveedores de salud pública.
En la primera ronda de consultas, las afecciones médicas más frecuentes fueron problemas respiratorios relacionados con la exposición al frío y la falta de tratamiento de infecciones, y dolores por lesiones producidas al caer de camiones mientras intentaban cruzar el Canal de la Mancha. El equipo de MSF también atendió a personas que habían sufrido violencia física en su viaje y a personas que habían pasado por experiencias traumáticas, como sobrevivir a naufragios en el Canal de la Mancha.
La reducción de rutas seguras y legales hacia el Reino Unido no hace sino aumentar el número de tragedias en esta frontera. Según el Observatoire des migrants morts à Calais, más de 350 personas perdieron la vida en Francia, Bélgica, Reino Unido o en el mar mientras intentaban llegar a Inglaterra entre 1999 y 2023. Miles más viven con lesiones físicas y psicológicas como consecuencia de las políticas de los gobiernos francés y británico.
El equipo de MSF trabaja con organizaciones de voluntarios que llevan mucho tiempo operando en la zona. “Gracias a ellas y a la generosidad de ciudadanos solidarios, los migrantes pueden cubrir sus necesidades básicas”, afirma Joyau. “Sin embargo, la obstrucción al trabajo de las organizaciones de voluntarios ha aumentado y, a pesar de las denuncias y los recursos legales, las prácticas de la policía y las autoridades locales no han cambiado”.
Silvia Fernández