La falta de visas para el personal de MSF amenaza la atención médica vital en el Hospital Turco de Jartum

Jartum / Nairobi, 9 de agosto de 2023.- Sin la concesión urgente de visados por parte de las autoridades sudanesas, en Médicos Sin Fronteras (MSF) puede verse obligada a retirar pronto el apoyo al Hospital Turco de Jartum.

Las solicitudes de visado para el personal de urgencias, que incluye a personal de cirugía, enfermería y otras especialidades, llevan pendientes más de ocho semanas.

Las visas de gran parte del personal que actualmente mantiene en funcionamiento el hospital están próximas a vencer, lo que significa que este equipo tendrá que salir del país. Como resultado, el apoyo que MSF brinda al Ministerio de Salud en la instalación, uno de los pocos hospitales en todo Jartum que brinda atención las 24 horas, tendrá que terminar en breve.

“El equipo de MSF que actualmente está presente dentro del hospital ha trabajado incansablemente con nuestros socios del Ministerio de Salud durante más de dos meses para mantener las abiertas las instalaciones y ampliar los servicios que facilita. Se han quedado incluso después de un grave incidente en el que nuestro equipo sufrió una agresión, amenazas de muerte y robo”, expone Claire Nicolet, directora de emergencias de MSF para Sudán.

“A pesar de nuestro compromiso de continuar trabajando en este hospital, la atención vital que brinda nuestro equipo se ve amenazada por la falta de posibilidades para traer nuevo personal al país”, añade Nicolet.

“La situación de seguridad y la falta de combustible en Jartum hacen que cada día suponga un nuevo reto para nuestro personal, reto que se suman al desafío diario de mantener con vida a nuestros pacientes. Necesitamos poder reemplazar regularmente a nuestros equipos para seguir enfrentando estos retos y brindando atención vital. Tenemos un equipo listo para llegar al lugar, pero sin visas no pueden desplazarse”, explica. "Necesitamos siete visas para sustituir a nuestro equipo en el Hospital Turco de Jartum. Además de la concesión de las visas que hemos solicitado, también hacemos un llamamiento a las autoridades sudanesas para que pongan en marcha procesos transparentes de aprobación de permisos que nos permitan sustituir regularmente a nuestro personal en el país”.

“Si no podemos incorporar nuevo personal, nos veremos obligados a retirarnos del hospital. Esto tendrá un impacto devastador en las personas que permanecen en Jartum, quienes necesitarán atención sanitaria vital en los próximos meses”, recalca la directora de emergencias de MSF para Sudán.

En las seis semanas transcurridas entre mediados de junio y finales de julio, MSF trató a más de 3 800 pacientes en el Hospital Turco. Entre ellos se incluyen más de 1 700 consultas en urgencias, el 20% de ellas a pacientes con heridas de guerra. En el mismo periodo de tiempo, el hospital atendió a cerca de 800 personas que necesitaban atención hospitalaria, incluyendo a más de 200 niñas y niños. La mayoría de estos casos pediátricos han sido neonatos con sepsis, ictericia y desnutrición. La atención materna y el tratamiento de enfermedades crónicas también son servicios clave brindados en este hospital.

Desde el comienzo de la crisis en abril, las autoridades sudanesas han centralizado la concesión de visas en Port Sudan y han dejado de conceder visas de residencia. Esto quiere decir que los permisos se conceden solo por dos meses, con la posibilidad de prorrogarse un mes más si la persona puede desplazarse a Port Sudan. Eso resulta muy complicado dadas las condiciones de seguridad en partes del país en la que MSF trabaja, como Darfur y Jartum.

Solo se ha otorgado un grupo de siete visas desde abril para nuestro equipo que trabaja en el Hospital Turco en Jartum. Las visas para otros proyectos de MSF en el país también se han concedido con poca frecuencia. Es fundamental un proceso más predecible y un mayor número de visados para que MSF pueda mantener y ampliar la respuesta acorde a las enormes necesidades del país.

Médicos Sin Fronteras trabaja para responder a la crisis en Sudán desde que comenzó en abril. Actualmente está presente en 12 estados: Jartum, Kassala, Gezira, Darfur Occidental, Darfur del Norte, Darfur Central, Darfur del Sur, Mar Rojo, Gadarif, Nilo Azul, Río Nilo y Nilo Blanco.

En Jartum, además en el Hospital Turco, MSF facilita atención quirúrgica a pacientes con heridas de guerra en el Hospital Bashair. La organización médico-humanitaria también trabaja en el hospital Al Nao en Omdurman, al noroeste de Jartum, y apoya a otras instalaciones en la capital sudanesa.

MSF cuenta en la actualidad con personal suficiente para mantener sus actividades en estos otros centros médicos de Jartum. Sin embargo, desde el inicio del conflicto la necesidad de rotar al personal e incorporar a nuevos equipos ha sido un problema recurrente debido a la continua dificultad para obtener visados.