"Comemos comida de pájaro, de burro o hierba que recogemos en la calle"
Suhail Habib, trabajador humanitario de MSF en el norte de Gaza, relata las duras condiciones de vida a las que se enfrentan él y su familia
Gaza / Madrid, 8 de marzo de 2024.- El norte de Gaza lleva meses sin recibir asistencia, lo que deja a la población atrapada y sin otra opción que intentar sobrevivir con cantidades minúsculas de alimentos, agua y suministros médicos. Barrios enteros han sido bombardeados y destruidos.
Aunque Médicos Sin Fronteras (MSF) tiene una visibilidad limitada de la situación humanitaria y sanitaria general en el norte, algunos miembros de su personal siguen atrapados allí. Trabajadores de la organización en el norte informan de una catastrófica falta de alimentos y agua.
"Llevo tres días sin comer y mi mujer me sigue preguntando: ‘¿Qué has comido hoy? Qué has comido hoy?’. Le respondo que no tengo hambre".
Suhail Habib, trabajador humanitario de MSF en el norte de Gaza, relata las duras condiciones de vida a las que se enfrentan él y su familia. Suhail, supervisor de mantenimiento de vehículos de MSF, habla de la falta de comida y de cómo hace lo imposible para alimentar a su familia.
“La vida no sólo se ha vuelto difícil, se ha puesto cinco veces más difícil.
No podemos encontrar harina porque el Ejército israelí la bloquea.
Nos vemos forzados a comer alimento de animales para sobrevivir. A veces comemos comida de pájaro, de burro o en ocasiones hierba que recogemos de las esquinas de las calles. Intentamos sobrevivir al hambre.
Llevo tres días sin comer y mi mujer me sigue preguntando: ‘¿Qué has comido hoy? Qué has comido hoy?’. Le respondo que no tengo hambre.
Vuelvo a casa con las manos vacías, sin comida, sin harina, sin pan, sin arroz.
Hoy, un kilo de arroz cuesta 33 dólares, así que no puedo permitirme alimentar a los niños.
No tenemos agua limpia, no hay agua potable. No tenemos electricidad y no podemos conseguir medicinas.
Mi madre padece hipertensión y diabetes, y no puedo conseguir medicamentos para ella.
Mucha gente en Gaza sufre problemas respiratorios por el humo y el polvo [que levantan] los bombardeos. Las enfermedades contagiosas también se están propagando rápidamente”
Las fotografías del vídeo que acompañan el testimonio de Suhail fueron tomadas por él mismo con su teléfono
Guillermo Algar